La llegada a la conservadora localidad francesa de Lansquenet de la misteriosa Vianne Rocher, madre soltera de la pequeña Anouk, produce insospechados efectos entre sus moralistas habitantes. Vianne abre una chocolatería: un hecho sin aparente importancia que terminará por hacer estragos en una población deseosa de aprovechar cualquier situación para sentirse libre y abandonar la represión en la que, no obstante, algunos se anquilosan.