
En la Novena, nada hace entrever el panorama sombrío en el que fue
compuesta. Esta sinfonía impresiona, conmueve y alegra al espectador con su creatividad, su energía y su momento cumbre: la “Oda a la alegría”. 160 años después de haber sido compuesta, la Unión Europea convertía este canto a la fraternidad de Beethoven en su himno oficial. Pero también fuera de las fronteras del viejo continente crece el entusiasmo por la Novena de Beethoven. ¿A qué se debe su enorme éxito hasta hoy? ¿Qué es lo que fascina de esta obra a gente de todo el mundo? Con motivo del 250 aniversario del nacimiento de Ludwig van Beethoven, “Una sinfonía para el mundo” aborda la más famosa de las obras del compositor, viajando alrededor del globo desde Europa a Latinoamérica, a Asia y a África. Grandes personalidades del mundo de la música que han interpretado y reinterpretado la Novena relacionándola con la tradición musical de sus países de origen u oponiéndola a ese mismo legado nos hablan sobre la sinfonía. Estos encuentros musicales impresionan, a la vez que resultan muy personales e intensos, y nos conducen una y otra vez a la época en que fue compuesta la Novena Sinfonía y a la inescrutable biografía de Ludwig van Beethoven, tan llena
de vicisitudes.