Artistas colombianos de diferentes disciplinas que han indagado en el conflicto a través de sus obras, realizan un viaje hacia territorios del país, donde comunidades han vivido episodios de violencia y se han apropiado del arte para resistir. El encuentro, enmarcado en una festividad relacionada con la música, el teatro o la plástica, propicia un escenario vivo de creación colectiva que fusiona diferentes formas de creación y evidencia procesos de diálogo y reconciliación a través del arte.